sábado, 9 de febrero de 2008









No olvido
la tibia voz del manglar
ni el veloz tacto de la plata.

Cifra son de esta hora.

Circundo palabra inaugural
como rumor de un ejército.

Severa
inscripción.







Francisco R. Hernández, de La sed y el incendio

2 comentarios:

karmen blázquez dijo...

La voz, el tacto, maravilla que dices
"cifra son de esta hora", inscriptos, sí, en nuestra apariencia, apariencia no obstante, incusa.
Salud Os
k

Durandarte dijo...

Gracias, Karmen, por tus palabras.

P.